Hombre lobo

Un hombre lobo es un ser humano que tiene la capacidad de transformar su cuerpo para adoptar las características y habilidades de un lobo.

También llamado licántropo, se trata de una criatura que ha estado presente en mitos y leyendas de muchas culturas independientes desde tiempos inmemoriales.

La palabra licántropo proviene del griego, y es un vocablo formado por las palabras lýkos, que significa lobo, y la palabra ánthröpos, que quiere decir hombre.

Junto con el vampiro, el hombre lobo es uno de los mitos más universales. Pues Incluso al día de hoy, muchas personas creen en la existencia de alguna forma de licantropía u “hombres bestia”.

¿Que significa ser hombre lobo?

Básicamente, esta criatura tiene la capacidad de transformarse de hombre a lobo y viceversa. Transformación que en algunas leyendas puede ser completa, y en otros resulta en una especie de hibrido, con fuerza sobrehumana e insaciable apetito.

En su forma animal, el hombre lobo varía según la cultura, pero lo más común es que fuera indistinguible de un lobo común, aunque de mayor tamaño, ojos y voz de humano, y en algunos casos sin cola.

Cabe destacar que según la versión, el hombre lobo puede transformarse de manera voluntaria o involuntaria, bajo ciertas condiciones específicas.

En algunas leyendas, se supone que la causa de la licantropía sería una condición de nacimiento, mientras que en otras, se señala una mordedura de otro hombre lobo, o incluso una maldición.

Asimismo, la transformación puede ser temporal o permanente, y en el folclore europeo se creía que algunos hombres lobo podían mostrar algunas características físicas distintivas en su forma humana, como las cejas unidas, uñas curvas y orejas bajas.

En cuanto a las vulnerabilidades de la criatura, también hay variaciones. No obstante, en la mayoría de las versiones no tienen inmunidad sobrenatural. Es decir, aunque poseen gran fuerza y resistencia pueden ser heridos por armas convencionales.

En otras representaciones se muestran a los hombres lobo como inmortales, o casi indestructibles. A menos que se utilice un elemento específico para detenerlos, como una bala de plata. La cual es la única manera de matar a un licántropo en algunas versiones modernas.

En cuanto a las curas para la licantropía, también son variadas. En la edad media, algunas de estas prácticas eran letales y otras menos extremas, y van desde clavos en las manos del supuesto hombre lobo, hasta llamarlo tres veces por su nombre cristiano.

El efecto de la luna en los hombres lobo surgió en el siglo XX | Foto Pixabay

Historia del hombre lobo

La referencia más antigua es la Epopeya de Gilgamesh, un poema de 5.000 años de antigüedad. En el cual el protagonista rechaza a una hermosa joven porque descubrió que ella convirtió a su antiguo amante en lobo.

En la antigüedad clásica, se hace mención a los hombres lobo en la mitología griega cuando Heródoto escribió sobre los Neuri. Tribu que residía al noreste de Escitia y que se transformaba en lobo por varios días una vez al año.

En el siglo II a.C. fue Pausanias quien relató la historia del rey Licaón de Arcadia, quien en su versión fue transformado en lobo por Zeus, como castigo por haber sacrificado a un niño.

También Ovidio y otros escritores como Virgilio, Plinio el viejo y Evantes, escribieron sobre hombres convertidos en lobo.

Existe evidencia de la creencia en hombres lobo en la Europa Medieval. Pues estos se mencionan en los códigos de leyes medievales del rey Cnut.

En las obras de Agustín de Hipona, que fueron una gran influencia para el cristianismo occidental, también se hacía referencia ocasional a hombres lobo.

En el 1200, el poema Bisclarver de Marie de France relata que un Barón de Bretaña se transformaba en lobo cada semana.

Con la llegada del cristianismo, el hombre lobo se convirtió en una representación de las fuerzas del mal, o el resultado de maldiciones o hechizos relacionados con la brujería.

La licantropía fue acusación común en juicios de bruja en la primera mitad del siglo XV. No obstante, después de 1650 la creencia casi desapareció, y solo hubo reportes ocasionales hasta el siglo XX.

El primer largometraje sobre un hombre lobo fue Werewolf of London, en 1935. Para el cual, Universal Studios se basó en una leyenda de los Balcanes sobre una planta vinculada con la licantropía.

¿Como se convierte en hombre lobo?

En las numerosas leyendas históricas que se conocen sobre hombres lobo se mencionan diferentes maneras en las que se convierte un hombre lobo.

Una de las formas más simples conocidas, es la de utilizar un cinturón hecho de piel de lobo, o en algunos casos la piel completa del animal.

También se habla de emplear un ungüento mágico que se frota por todo el cuerpo, o beber agua de lluvia de la huella de un lobo, o de un determinado manantial encantado.

La versión del escritor sueco Olaus Magnus, señalaba que los hombres lobo recibían su iniciación con un vaso de cerveza preparado de una manera especial y repitiendo una cierta fórmula.

En Italia, Francia y Alemania, se decía que si una persona dormía fuera un cierto miércoles o viernes de verano con la luna llena brillando sobre su cara, podía convertirse en hombre lobo.

Otras historias afirmaban que esta transformación se lograba a través de una alianza satánica, pero también era considerada en otros casos como un castigo divino.

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También se atribuyó algunas transformaciones de este tipo a santos cristianos. Pues se cuenta que San Patricio convirtió al rey galés Verético en un lobo. Mientras que Natalis de Ulster condenó una familia irlandesa a ser lobos durante siete años.

En algunas leyendas de Rusia, los hombres son transformados en licántropos como consecuencia de incurrir en la ira del diablo.

En el folclore de Portugal, Uruguay, Brasil y Argentina, se llegó a creer que el séptimo de los hijos nacería varón y sería un hombre lobo. Tal creencia se extendió tanto que los niños eran abandonados, dados en adopción o asesinados.

Así como la supuesta vulnerabilidad a la plata, la luna llena como detonante de la transformación no se popularizó hasta el siglo XX. Siendo la primera película que tomó esta idea Frankestein Meets the Wolf Man, en1943.